23 de dec. de 2010

Fascismo


 Doce mirar, espello da esperanza,
lúa gris como un ave tenra, dame
un anaco de serra -toxo, herdanza
de lama triste- pra esquence-lo arame
de espiño que regula os nosos pasos.
Xosé Luís Méndez Ferrín


Se despierta el dragón dormido
de un sueño placentero de olvidos
y complicidades necesarias.
Se despierta el dragón dormido
aprovechando la flaqueza de una sociedad
embriagada de artificios
en la que nadie se da por enterado,
y los rugidos se multiplican
sin alterar las conciencias sordas
por una comodidad prestada
que anula la libertad
y se entrega derrotada
sin tan siquiera suspirar.

Publicado en Voz Emérita

3 comentarios:

Mamen Alegre dixo...

¿Sabes Suso quienes oyen su rugido? Los que ya lo conocen.
Hace sólo un día hablaba de esto mismo con una tía mía de 92 años.

Un buen poema :)

Abrazos

Suso Díaz dixo...

Tienes mucha razón Mamen, pero uno no deja de ver demasiadas semilitudes con otros tiempos no tan lejanos.
Un abrazo.

faustino lobato dixo...

Me gustó el poema. Eres genial amigo. Un abrazote